Este caldero de cobre del siglo XIX es una joya única, cuidadosamente fabricada a mano mediante la técnica de martillado y remachado, lo que resalta su carácter auténtico. Ideal para decoraciones rústicas o vintage, es una pieza que aporta un toque de elegancia histórica a cualquier espacio. Su acabado barnizado garantiza que no tendrás que preocuparte por la limpieza continua, conservando su brillo impecable con el mínimo esfuerzo. Perfecto para exhibir junto a chimeneas, en salones o incluso como macetero.

 Este artículo de cobre, con su aspecto envejecido y resistente, es sin duda una pieza de colección que refleja una época de calidad artesanal.

Medidas 35 diámetro x 30 altura cm.

¡No dejes escapar esta oportunidad de poseer una obra de arte de excelente calidad!

Gastos de envío gratis en la península.